Los productos lácteos - incluyendo todos los derivados lácteos, leche, queso, requesón, yogur, kéfir, helado, etc - están relacionados con todo tipo de enfermedades, incluidas las enfermedades cardiovasculares, las enfermedades autoinmunes, el cáncer, las alergias, el asma, las enfermedades digestivas, problemas con las tiroides, enfermedades neurológicas, etc.
La lista es ilimitada y me gustaría poder incluirla aquí, pero por razones de espacio vamos a concentrarnos sobre el por qué esto es así.
La leche puede causar problemas de varias maneras:
A través de la sensibilidad a la proteína de la caseína que crea estragos en nuestros cuerpos de una manera similar a como lo hacen el gluten del trigo y otros granos.
A través de alergias a la leche, que se pueden yuxtaponer con el problema anterior.
A través de intolerancia a la lactosa.
A través de los alimentos que consume el ganado que pueden tener, entre otras cosas, las lectinas tóxicas de los granos consumidos o de los alimentos transgénicos. El ganado puede tener también hormonas, antibióticos, pesticidas, infecciones, etc.
A través de otros problemas también.Vamos a cubrir los principios básicos de cada problema.
Sensibilidad a la Caseina
La proteína de la caseína en los productos lácteos crea serios problemas, al igual que la proteína del gluten en algunos cereales como el trigo. Ambos pueden desencadenar una respuesta autoinmune y/o imitar endorfinas que causan cambios en la percepción, el estado de ánimo y el comportamiento.
El mecanismo involucrado tiene que ver con una falla en una enzima en particular que desmonta la proteína del gluten y la caseína, un proceso digestivo necesario para que nuestro cuerpo pueda extraer los nutrientes de estas proteínas.
Debido a la falla de esta enzima al hacer su trabajo, un fragmento no digerido de estas proteínas sobrevive y para nuestro sistema de defensa/inmunológico este fragmento se asemeja a un virus. Entonces, pensando que es un virus, nuestros cuerpos desencadenan una respuesta inmuno/defensiva para protegerse contra el 'invasor'.
Debido a que este fragmento de gluten o caseína es muy parecido a diversos virus causantes de enfermedades, generará una reacción compleja, una respuesta autoinmune que se sospecha desempeña un papel en la diabetes de tipo I, esclerosis múltiple y el autismo. Las complejas respuestas inmunes dañan diferentes tejidos en diferentes personas, por lo tanto, la gama de enfermedades es bastante diversa.
Además, los fragmentos de gluten o caseína no digeridos se parecen a drogas similares al opio, que pueden tener una influencia significativa en nuestro comportamiento y el cerebro. Son literalmente drogas - ¡Y es por eso que la gente está tan enganchada a los productos lácteos y el gluten!
En el libro
Detoxification and Healing, el doctor Sidney MacDonald Baker, explica esto como sigue (tenga en cuenta que lo siguiente se aplica a la caseína de la leche):
Una persona promedio y la mayoría de los doctores simplemente no pueden creer que la dificultad con la digestión y el procesamiento bioquímico o inmunológico del gluten que se encuentra en estos granos puede causar daño sustancial.
La intolerancia al gluten afecta aproximadamente a una de cada cien personas; si nos fijamos en las personas enfermas en lugar de hacerlo en la población general, usted encontrará una incidencia mucho más alta. Si usted tiene problemas de casi cualquier combinación de síntomas que puede nombrar o incluso si usted ha sido diagnosticado con una enfermedad y permanece sintomática, una eliminación breve de gluten en su dieta cubrirá este cuadro.
El gluten es la proteína en los granos de cereales como el trigo, el centeno y la cebada. Sensibilidad no es lo mismo que una alergia ordinaria.
Una mayor sensibilidad a los alimentos implica reacciones tardías y esto tiene que ver con los anticuerpos IgG. Es muy fácil identificar alergias a los alimentos si es que uno experimenta una reacción inmediata a ellos, por ejemplo, si ocurre una erupción después de comer fresas.
Pero es muy difícil de precisar una alergia alimentaria tardía porque no hay una evidencia precisa de su causa/efecto. Puede experimentar síntomas luego de dos horas, pero con frecuencia no aparecen hasta uno o tres días después de comer el alimento en cuestión.
Para complicar aún más las cosas, los síntomas aparecen y desaparecen. Usted puede comer gluten impunemente un día, pero le producirá diarrea las próximas tres veces que se dé el gusto. O sus síntomas pueden ser acumulativos, manifestándose sólo después de que haya comido gluten varias veces o haya hecho una combinación específica de alimentos a los cuales usted es sensible.
Las alergias tardías a los alimentos pueden causar innumerables síntomas y la enfermedad crónica a menudo implica un estado de vigilancia inmune inapropiada en los que la alergia alimentaria se involucra, incluso no siendo ésta la causa del problema.
Por alguna razón, el sistema de defensa inmunológico puede atascarse en una alerta de alta vigilancia y respuesta, dando lugar a síntomas inflamatorios crónicos que persisten e incluso se agravan mucho después de que el desencadenante inicial ha desaparecido.
Cuando esto sucede, su sistema inmunológico puede desarrollar una singular actitud agresiva hacia una variedad de antígenos o sustancias extrañas en su cuerpo, incluyendo muchas que se encuentran en los alimentos que consume.
El trigo, otros alimentos que contienen gluten y los productos lácteos pueden dar positivo en las pruebas de alergia a los alimentos IgG, pero esto produce en la persona efectos que no son realmente alérgicos pero están mediados por mecanismos que toman semanas o meses para remitir, incluso luego de evitar esos alimentos.
Los niños autistas suelen mejorar suficientemente con una dieta libre de gluten [y con una dieta libre de lácteos, esto está bien documentado] lo que hace que valga la pena continuar. La dieta evita trigo, centeno, cebada y todos los productos que contienen incluso trazas de la proteína (gluten) que se encuentran en estos granos. La avena es aún materia de controversia; algunos estudios no muestran ningún efecto negativo en las personas sensibles al gluten, pero otros individuos reportan reacciones a la misma.
La mayoría de los psicólogos, médicos, maestros, vecinos y padres rechazan la idea de que algo tan inocente como el pan o los espaguetis podrían hacer que pierdas tu integridad mental. Cada vez más profesionales prescriben una dieta libre de gluten para las personas con enfermedades como la esquizofrenia y el autismo como un tratamiento superior en lugar de que sea un último recurso.
Si usted tiene algún síntoma crónico y por algún motivo no ha intentado eliminar el gluten de su dieta entre tres semanas y tres meses, no podría apreciar la diferencia que puede significar eliminarlos.
Los médicos están condicionados a pensar que cada enfermedad tiene una causa separada y que cada una produce una enfermedad diferente, por lo cual no es una sorpresa que les resultará difícil creer que la sensibilidad a la proteína de trigo, centeno, cebada, y tal vez, la avena, podría producir una lista tan diversa de condiciones tales como dolores de cabeza, fatiga, malestar, depresión, cualquier tipo de problema digestivo crónico, incluyendo dificultad para subir de peso, dolor abdominal, diarrea, estreñimiento, colon irritable, alimentos no digeridos en las heces, el síndrome de Sjögren (sequedad ocular), la epilepsia asociada con calcificación cerebral, antecedentes de migrañas o problemas digestivos; osteoporosis, infertilidad, complicaciones del embarazo, como abortos espontáneos, bebés de bajo peso al nacer, linfoma intestinal, cáncer de esófago, diabetes, problemas de tiroides, la esquizofrenia, el autismo, la dermatitis herpetiforme (una condición crónica de la piel con pequeñas ampollas que se asemejan a los de las infecciones por virus del herpes).
Hay evidencia sustancial de una asociación causal entre la intolerancia al gluten y estos problemas. Y la lista crece a medida que los informes de casos de curas espectaculares producidas por una dieta libre de gluten atraen la atención de los investigadores.
Existen análisis de sangre y de orina que pueden predecir si usted se sentirá mejor al eliminar el gluten de su dieta, pero estos no son en absoluto totalmente decisivos. La respuesta a un cambio en la dieta será decisiva para usted.
Los pueblos originarios del norte de Europa, al igual que los pueblos de las Américas, África y el Lejano Oriente, no se habrían adaptado al consumo de trigo porque eran cazadores-recolectores o porque practicaban una agricultura basada en el maíz, el mijo, arroz, así como los tubérculos. [...]
A fin de comprender la sensibilidad al gluten, debemos entender la digestión de las proteínas. Una proteína es un conjunto de aminoácidos. Los aminoácidos unidos entre sí se llaman péptidos y cuando tenemos más o menos 100 aminoácidos unidos entre sí, tenemos una pequeña proteína. La mayoría de las proteínas tienen cientos o miles de aminoácidos, que se pliegan en formas que se mantienen permanentes por puentes, por lo general hechos de azufre.
La fuerza de este ensamble es muy fuerte, por lo que nuestro sistema digestivo se confía la tarea de desarmar a los miles de aminoácidos a partir de nuestros alimentos en aminoácidos individuales, que luego pasan a nuestro torrente sanguíneo para ser reensamblados como nuestras proteínas.
Para ser más precisos, nuestro tracto digestivo utiliza los ácidos del estómago y los jugos alcalinos de nuestro intestino, junto con las enzimas digestivas para hacer este trabajo. Enzimas específicas desmontan las proteínas en péptidos. La intolerancia al gluten tiene que ver con una falta de una enzima en particular, una peptidasa llamada DPP-4.
Cuando la misma enzima se separa de un linfocito, una célula de nuestro sistema de defensa/inmunológico que aparentemente realiza un trabajo diferente dentro del cuerpo, es llamada CD26 . Debido a la falta o insuficiencia de DPP4, un fragmento no digerido de proteína, o péptido, sobrevive y parece causar confusión al sistema en al menos dos formas.
En primer lugar, este péptido no digerido, resulta familiar para el sistema de defensa/inmunológico, en otras palabras, se produce un mimetismo que se basa en la debilidad digestiva entre los descendientes de los pueblos que no han estado comiendo trigo el tiempo suficiente como para adaptarse. Esto causará síntomas originados en la activación de una respuesta inmune contra un péptido de aspecto sospechoso que se asemeja a un virus para nuestro sistema de defensa/inmune.
Debido a que el péptido derivado del gluten es similar a diversos virus causantes de enfermedades, se genera una compleja respuesta defensiva por parte del sistema inmune, en la que luego el sistema inmune no encuentra un virus para matar. El siguiente paso es el daño a los tejidos por los anticuerpos dirigidos al péptido.
Se sospecha que este triángulo de estímulo viral, respuesta inmune y daño inmunológico, son muy comunes en varias enfermedades como la diabetes de tipo I, esclerosis múltiple y el autismo. Los daños provocados por la respuesta inmune dañan diferentes tejidos en diferentes personas.
La segunda forma en que los péptidos del gluten sin digerir causan problemas es mediante su introducción en la corriente sanguínea. Los péptidos liberados de gluten cuando hay un fallo de DPP4 poseen otro tipo de mimetismo aparte del parecido a péptidos de virus. Estos péptidos serían como el opio y la familia de medicamentos derivados del opio: la heroína, la morfina, la codeína y otros derivados semisintéticos.
Esto se entiende en base al hallazgo de péptidos opioides en la orina de individuos con autismo y esquizofrenia, y también por los dramáticos síntomas de abstinencias que se producen en algunos individuos cuando se abstienen del gluten. El malestar y la irritabilidad se parecen mucho a una forma suave de los síntomas que se observan por la abstinencia de heroína.
La mayoría de los individuos con síntomas relacionados con el gluten comenzarán a experimentar alivio en unos pocos días después de excluir todo el gluten. Puede tomar entre 3 semanas y 3 meses.
Muchos médicos definen el problema en términos de prueba de laboratorio. Estas pruebas de laboratorio tienen el propósito de indicar la enfermedad celíaca, que no necesariamente tiene una relación de uno a uno con todos los otros problemas asociados con la sensibilidad al gluten. La enfermedad celíaca es sólo un aspecto que pertenece a un espectro más amplio de la sensibilidad al gluten. [...]
Todo lo que habíamos aprendido sobre el gluten se aplica a la caseína, una de las principales proteínas de la leche, y a la falta del DPP4, por lo tanto, los péptidos pasan a la sangre donde hacen daño al evocar una respuesta autoinmune o emular endorfinas que causan cambios en la percepción, el estado de ánimo y el comportamiento; esto implica decir que la leche puede también causarle problemas de otras formas. [...]
La falta de estas enzimas (peptidasas) no se debe sólo a la heredabilidad, también se cree que es debido a múltiples factores, incluyendo la toxicidad (por ejemplo, toxicidad de metales pesados), que termina por perjudicar su función. Tenga en cuenta que realmente no hay manera de evitar la toxicidad de metales pesados, por su prevalencia en todo el mundo. Algunos se pueden desintoxicar mejor que otros, sin embargo.
Existen pruebas de laboratorio que se pueden hacer para diagnosticar este problema, pero estas pruebas no han sido perfeccionadas hasta el punto en el que puedan sustituir a un cambio en la dieta.
Alergia a la leche
La alergia a la leche es otro problema y no tiene una frontera clara con la sensibilidad a la caseína. Puede producir casi cualquier síntoma que se pueda imaginar. Las alergias implican, médicamente, una reacción del sistema inmune que difiere de la descrita arriba en el caso de los péptidos. Cuando hay una reacción alérgica a las proteínas de la leche (caseína generalmente) puede haber urticaria, eczema, hinchazón, picazón o problemas digestivos, o una reacción tardía que puede mostrar casi cualquier forma o enfermedad. Una reacción tardía puede ocurrir a intervalos e intensidades variables luego del consumo de productos lácteos.
Intolerancia a la lactosa
Este es otro problema relacionado con la leche. La lactosa es un azúcar que se encuentra en la leche de cualquier mamífero y se compone de dos azúcares simples: glucosa y galactosa. Hay personas que carecen de la enzima necesaria para separar estos azúcares para que estos puedan ser absorbidos en el torrente sanguíneo.
Cuando esto sucede, la lactosa no digerida permanece en el tracto digestivo, en donde la flora digestiva la consume. Como consecuencia de esto puede haber urgencia intestinal, calambres, diarrea y gases. Pruebas de aliento de hidrógeno pueden distinguir este problema en particular de intolerancia a la lactosa.
Ganadería cuestionable
Los productos lácteos pueden tener hormonas, productos químicos, pesticidas, antibióticos, sangre, pus, lectinas tóxicas de los granos consumidos o alimentos transgénicos, entre otras cosas. También ha habido preocupación de infecciones virales con virus de la leucemia bovina (relacionados con la leucemia y linfomas) o un virus parecido al del SIDA. Salmonella, E. coli,e infecciones por estafilococos se pueden relacionar a la leche también. Véase, por ejemplo, la
Carta de la leche (en inglés) para obtener más información.
Otros problemas
Si usted no ha oído que los países con el mayor consumo de productos lácteos tienen los mayores índices de osteoporosis, ahora que si lo escucho, también entenderá el porqué. Este extracto es del libro
La Enzima Prodigiosa, donde el doctor Hiromi Shinya resume otros problemas con la leche y los productos lácteos en general, incluyendo el yogur:
Los principales nutrientes que se encuentran en la leche son proteínas, grasas, glucosa, calcio y vitaminas. La leche es muy popular debido a que contiene una gran cantidad de calcio y se supone que previene la osteoporosis.
Pero la verdad es que no hay ningún otro alimento que sea tan difícil de digerir como la leche. Dado que la leche es una sustancia líquida suave, hay algunas personas que la beben como agua cuando tienen sed, pero esto es un gran error. La caseína, que representa aproximadamente el 80% de la proteína que se encuentra en la leche, de inmediato, se agrupa una vez que entra en el estómago, lo que hace muy difícil su digestión.
Además, dicho componente se homogeneiza en la leche vendida en tiendas. Homogeneización significa igualar el contenido de grasa en la leche por agitación. La razón por la cual la homogeneización es mala es que cuando la leche se agita, el aire se mezcla en la misma, convirtiendo el contenido graso de la leche en una sustancia grasosa oxidada - grasa en un avanzado estado de oxidación. En otras palabras, la leche homogeneizada produce radicales libres y ejerce una influencia muy negativa en el cuerpo.
La leche que contiene grasa oxidada luego se pasteuriza a altas temperaturas por encima de 100 °C. Las enzimas son sensibles al calor, y comienzan a ser destruidas a temperaturas de 93 °C. En otras palabras,la leche vendida en tiendas no sólo carece de sus preciosas enzimas, sino que también la grasa se oxida y la calidad de las proteínas se modifica debido a la alta temperatura. En cierto sentido, la leche es el peor tipo de alimento.
De hecho, he oído que si usted alimenta a un ternero con la leche que se vende en las tiendas en lugar de hacerlo directamente con la leche de la madre, el ternero muere en cuatro o cinco días. La vida no puede ser mantenida con los alimentos que no tienen enzimas.
La Leche causa Inflamación
La primera vez que me enteré de lo mala que es la leche para el cuerpo fue hace más de 35 años, cuando mis propios hijos desarrollaron dermatitis atópica a los seis o siete meses de edad.
La madre de mis hijos siguió las instrucciones del pediatra, pero sin importar la cantidad de tratamiento que recibieron, la dermatitis de los niños no mejoró en absoluto. Luego, entre sus tres o cuatro años, mi hijo comenzó a tener diarrea severa. Y, por último, incluso comenzó a verse sangre en su materia fecal. Tras un examen con un endoscopio, descubrí que el niño manifestaba las primeras etapas de la colitis ulcerosa.
Conociendo que la colitis ulcerosa está estrechamente vinculada a la dieta personal, me centré en ver qué tipo de alimentos los niños comían por lo general. Al final resultó que, justo cuando los niños comenzaron a desarrollar dermatitis atópica, mi esposa había dejado de amamantarlos y había empezado a darles leche bajo el consejo del pediatra.
Eliminamos toda la leche y los productos lácteos de la dieta de los niños a partir de entonces. Y efectivamente, las heces y la diarrea sanguinolenta, e incluso la dermatitis atópica, han desaparecido completamente.
Luego de esta experiencia, comencé a obtener una lista detallada de cuánta leche y productos lácteos son consumidos al preguntar a mis pacientes acerca de su historia dietética. De acuerdo con mis datos clínicos, existe una alta probabilidad de desarrollar una predisposición a las alergias por el consumo de leche y productos lácteos. Esto se correlaciona con estudios recientes sobre alergias, que informan que cuando las mujeres embarazadas beben leche, sus hijos son más propensos a desarrollar dermatitis atópica.
Durante los últimos 30 años en Japón, el número de pacientes con dermatitis atópica y la fiebre del heno se han incrementado a un ritmo asombroso. Ese número puede ser en la actualidad tanto como una de cada cinco personas. Hay muchas teorías sobre por qué se ha producido allí un rápido incremento en el número de personas con alergias, pero creo que la causa principal es la introducción de la leche en los almuerzos escolares a principios de 1960.
La leche, que contiene muchas sustancias grasas oxidadas, daña el medio ambiente intestinal, aumentando la cantidad de bacterias malas y destruyendo el equilibrio de la flora bacteriana intestinal. Como resultado, toxinas tales como los radicales libres, sulfuros de hidrógeno y amoniaco se producen en el intestino.
La investigación sobre el tipo de proceso por el cual estas toxinas pasan y qué tipos de enfermedades surgen por esto aun esta en curso, pero varios trabajos de investigación han informado que la leche no sólo provoca alergias diversas, sino que también está relacionada con la diabetes entre los niños. Estos trabajos de investigación están disponibles en Internet, así que os animo a que ustedes mismos los lean.
¿Por qué beber mucha leche causara osteoporosis?
El mayor error común acerca de la leche es que ayuda a prevenir la osteoporosis. Dado que el contenido de calcio en nuestro cuerpo disminuye con la edad, se nos dice que bebamos mucha leche para prevenir la osteoporosis. Pero esto es un gran error. Beber mucha leche realmente causa la osteoporosis.
Comúnmente se cree que el calcio en la leche se absorbe mejor que el calcio de otros alimentos como peces pequeños, pero eso no es del todo cierto. La concentración de calcio en la sangre humana se fija normalmente en 9-10 mg.
Sin embargo, cuando usted bebe leche, la concentración de calcio en la sangre se eleva súbitamente. Aunque a primera vista, puede parecer que se ha absorbido una gran cantidad de calcio, este aumento en el nivel de calcio en la sangre tiene su lado negativo.
Cuando la concentración de calcio en la sangre se eleva de repente, el cuerpo trata de devolver este nivel anormal de nuevo a la normalidad mediante la excreción de calcio en los riñones a través de la orina. En otras palabras, si usted trata de tomar leche con el fin de obtener calcio, lo que irónicamente se produce en realidad como resultado es la disminución del nivel general de calcio en su cuerpo.
Los cuatro grandes países lecheros - Estados Unidos, Suecia, Dinamarca y Finlandia - donde se consume una gran cantidad de leche todos los días, tienen mayor casos de fracturas de cadera y osteoporosis.
En contraste con esto, pequeños peces y algas, que los japoneses han estado consumiendo durante años y que son considerados originalmente como bajos en la cantidad de calcio, contienen calcio que no se absorbe rápidamente, de manera que no elevan el nivel de concentración de calcio en la sangre.
Por otra parte, casi no había casos de osteoporosis en Japón durante el tiempo en que las personas no tomaban leche. Incluso ahora, no se oye acerca de muchas personas que tengan osteoporosis entre aquellos que no beben leche de forma regular. El cuerpo puede absorber el calcio y los minerales necesarios a través de la digestión de pequeños camarones, peces y algas.
Por qué pongo en duda el "mito" sobre el yogur
Recientemente en Japón, varios tipos de yogur como el "yogurt del Mar Caspio" y el "yogurt de aloe" se han vuelto muy populares debido a sus ampliamente publicitados beneficios para la salud. Pero creo que esto es una gran tergiversación.
Lo que a menudo escucho de la gente que come yogur es que su condición gastrointestinal ha mejorado, que ya no tienen estreñimiento o que su cintura ha disminuido. Y creen que estos resultados se deben a loslactobacilos encontrados en todos los yogures.
Sin embargo, esta creencia en los beneficios de los lactobacilos es cuestionable desde el principio. Los lactobacilos se encuentran originalmente en el intestino humano. Estas bacterias son llamadas "bacterias residentes intestinales."
El cuerpo humano tiene un sistema de defensa contra las bacterias y los virus que vienen del exterior, por lo que incluso las bacterias que normalmente son buenas para su cuerpo, como los lactobacilos, serán atacadas y destruidas por las defensas naturales del cuerpo si no son bacterias residentes intestinales.
La primera línea de defensa es el ácido estomacal. Cuando loslactobacilos del yogur entran en el estómago, la mayoría de ellos son asesinados por el ácido estomacal. Por esa razón, se han producido mejoras recientes y los yogures se venden con el eslogan, "lactobacilosque llegan a su intestino."
Sin embargo, incluso si las bacterias llegan al intestino, ¿es realmente posible que las mismas puedan trabajar mano a mano con las bacterias residentes intestinales?
La razón por la que cuestiono esta afirmación sobre el yogur se debe a que en el ámbito clínico, las características intestinales de las personas que comen yogur todos los días nunca son buenas. Tengo la firme sospecha de que, incluso si los lactobacilos en el yogur llegan vivos al intestino, no hacen que el intestino trabaje mejor, y más bien, en lugar de eso, consiguen alterar la flora intestinal.
Entonces, ¿por qué muchas personas sienten que el yogur es eficaz para mejorar su salud? Para muchos, el yogur parece "curar" el estreñimiento. Esta "cura", sin embargo, es en realidad un caso leve de diarrea. Esta es la forma en que probablemente esto ocurra: Los adultos carecen de suficiente cantidad de la enzima que descompone la lactosa.
La lactosa es el azúcar que se encuentra en los productos lácteos, pero la lactasa, la enzima que descompone la lactosa, comienza a disminuir en nuestros cuerpos a medida que envejecemos. Esto es natural en un sentido, porque la leche es algo que beben los infantes, no los adultos. En otras palabras, la lactasa es una enzima que no es requerida por los adultos.
El yogur contiene una gran cantidad de lactosa. Por lo tanto, cuando usted come yogur, la misma no puede ser digerida adecuadamente debido a la falta de enzimas de lactasa, lo que a su vez da lugar a la indigestión.
En resumen, muchas personas desarrollan diarrea leve cuando comen yogur. En consecuencia, esta diarrea leve, que es realmente la excreción de heces estancada que se ha ido acumulando en el colon hasta entonces, se caracteriza erróneamente como una cura para el estreñimiento.
La condición de su intestino se agravará si usted come yogur todos los días. Puedo decir esto con confianza en base a mis observaciones clínicas. Si usted come yogur todos los días, el olor de las heces y los gases intestinales serán cada vez más acres. Esto es una indicación de que su entorno intestinal esta cada vez peor.
La razón del olor es porque se están produciendo toxinas dentro del colon. Por lo tanto, a pesar de que la gente habla de los efectos saludables del yogur en general (y las compañías de yogurt están más que satisfechas porque promueven la venta de sus propios productos), en realidad, hay muchas cosas sobre el yogur que no son buenas para tu cuerpo.
Sin embargo, otro problema con los productos lácteos es su contenido de lectinas que puede también causar otros problemas graves, enfermedades como la esclerosis múltiple, esquizofrenia, enfermedades autoinmunes, artritis reumatoide, etc. La sensibilidad a las lectinas es completamente otra historia, y parece estar relacionada con la calidad de la alimentación del ganado. Para obtener más información, puede leer el
Informe sobre lectinas (en inglés).
La Solución
Recuerde que estos problemas se aplican a todos los productos lácteos, incluyendo la leche, el queso, requesón, yogur, kéfir, helado, etc. Cuando la caseína es el problema, la leche cruda con todos sus beneficios no va a ayudar. Piense en ello como un fármaco opioide adictivo que ofrece una solución. La mantequilla se considera segura por algunos, pero tiene que ser probada a través de una
dieta de eliminación para ver si realmente se tolera. Una buena alternativa es la
mantequilla clarificada (ghee).
Por lo general, anhelamos los alimentos que nos causan problemas y a los cuales somos intolerantes. Las personas suelen experimentar síntomas de abstinencia si se excluyen estos alimentos de la dieta, pero estos síntomas de abstinencia son sólo temporales y se pueden aliviar con medidas naturales. La solución es hacer una dieta de eliminación, como se explica
aquí. ¡Déle un vistazo! Incluye consejos sobre cómo evitar también los síntomas de abstinencia.
El único período de tiempo en el que deberíamos estar consumiendo leche es cuando somos bebés y debe ser sólo la leche materna. Nosotros no estamos hechos para beber la leche de otros animales. Cuando adultos, simplemente no debemos consumir productos lácteos.
Creo que todo el mundo se beneficia al eliminar los productos lácteos y el gluten de sus dietas y que hacer la dieta de eliminación para detectar las alergias e intolerancias alimentarias es la primera clave para recuperar la salud.
La sensibilidad a los alimentos puede manifestarse no sólo en una gran variedad de enfermedades, sino que también la enfermedad crónica a menudo implica un estado de vigilancia inadecuado de nuestro sistema de defensa/ inmunológico en la cual las alergias alimentarias están involucradas, incluso si no son la causa del problema - factor que luego conduce a una inflamación crónica, ¡lo que se traduce en una enfermedad!
Lectura Adicional
© El Activista
Gabriela Segura es una cardiocirujana que nació en una familia multiétnica en América Central. Su continua aventura con la ciencia médica, la curación alternativa y la verdadera naturaleza de nuestro mundo, la ha llevado a vivir a Costa Rica, España, Canadá, Uzbekistán, Francia e Italia. Sus pasatiempos favoritos son SOTT, investigar y pasar tiempo con la naturaleza. Sus escritos se puede encontrar en
The Health Matrix
Gabriela Segura, M.D.
sab, 05 jun 2010 00:00 CDT
http://es.sott.net/article/28222-Por-que-la-leche-es-tan-mala